"Lo más importante que podemos hacer como padres
es leer con nuestros hijos desde un principio y con frecuencia. La lectura es
el camino seguro hacia el éxito en la escuela y en la vida. Cuando los niños
aprenden a amar los libros, aprenden a amar el aprendizaje. “
Laura
Bush
Hay
un programa de televisión que me gustaba ver de niña y recuerdo una canción que
marco mi vida. En su letra decía “El tesoro del saber en los libros encontrarás”,
por eso la frase de Laura Bush me hizo mucho sentido porque si buscamos que los
niños sean autodidactas para eso les tiene que gustar leer.
En
mi experiencia como animadora de lectura en el área de educación preescolar he
visto como al estimular a los niños
desde pequeños hace la diferencia
cuando ingresan al proceso formal de aprender
a leer. Hoy quiero compartir unos consejos para padres y maestros que
pueden ayudar para estimular este
proceso.
Desde
que un bebé está en el vientre de su mamá, si le ponen música para que escuche, le leen
cuentos y platican con él ya se está estimulando su gusto por la lectura y
desarrollando destrezas previas para la misma.
Curiosamente
una amiga cuando estaba embarazada le ponía música a su bebita y
grabó como bailaba. Fue algo maravilloso para mí ver la respuesta a ese estímulo.
Dentro
de esas destrezas previas que los niños
necesitan, encontramos el desarrollo de su motor grueso y fino, percepción y lenguaje. Por lo que si desde pequeños buscamos un
tiempo para leer con ellos cuentos, cantar, bailar, escuchar historias.
Estimulamos actividades físicas como gatear, saltar. Conforme van creciendo: caminar
con zancos de botes de leche vacíos y un lazo,
saltar cuerda, andar en bicicleta
y atarse en los zapatos. Esto le
ayudará en el desarrollo de su coordinación motriz y ritmo que es esencial para
el proceso de la lectura.
Un
fin de semana pueden asignar un tiempo
para compartir con su familia leyendo un cuento, hacer preguntas, como
por ejemplo: ¿Qué aprendió del cuento? ¿Qué haría él si se encontrara en la misma situación del personaje? ¿Si está
de acuerdo como actuó el personaje? Y buscar
una actividad significativa relacionada con el mismo. Por ejemplo: Leer “Ricitos de oro” y pues por la tarde salir a dar un
paseo.
Al
estimular a su hijo de esta manera, verán que muy pronto el comenzará a tomar
los libros o láminas e inventar sus propias historias déjenlo, esto le
ayudará en la estructuración de su lenguaje y con el tiempo verán que incrementa
su vocabulario.
Recuerden
que lo más importante es el tiempo en que como padres pasan con sus hijos y el
legado que les están dejando. Con estas actividades están despertando su
interés hacia la lectura y al mismo tiempo por el aprendizaje.
Si
quieren más consejos o tienen una consulta específica pueden comunicarse
conmigo al correo arbarreruiz@gmail.com. También les invito si quieren compartir su
experiencia como padres o maestros escriban un comentario.